Jackson Reid Briggs & The Heaters

Maldita boca. Maldito oído. Maldito punk-rock.
Jackson Reid Briggs, después de un año o dos tocando solo y exiliado de su hogar, a la deriva en la ciudad más habitable del mundo, necesitaba una banda. Emparedado en algún lugar entre sus ciudades natales, The Saints y Neil Young en su lugar más irregular, tocando en un viejo pub sucio en las afueras al que únicamente van los lugareños… pero donde enloquece el caballo de Young, Briggs se trastorna, se enrabia y se vuelve de lo más sediento. Los internos han tomado ya el asilo. Un grupo de amigos bebedores improvisados ​​por Briggs, algunos músicos otros simplemente malhumorados.
Desde el 2000 o algo así, Briggs y sus Heaters han estado preocupados por admiradores y espectadores horrorizados, desde Brisbane a París, Belgrado, Tokio y de regreso a cualquier bar en Melbourne que los tenga. Pueden caer en el escenario pero, por Dios, ¡menudo jaleo!